Más de cien millones de pipas cubren desde hoy y hasta el 2 de Mayo de 2011 el hall de entrada de la Tate Modern. Es la undécima intervención de las Unilever Series, para las que la galería contrata anualmente a un artista para llevar a cabo una obra especialmente diseñada para este espacio.  Esta vez el invitado ha sido Ai Weiwei, uno de los más sobresalientes artistas conceptuales chinos.

En un momento en el que ya no existen los originales sino las copias ilimitadas, Sunflower Seeds es una obra compuesta por más de 100 millones de piezas aparentemente iguales pero todas  distintas, únicas.  Por reales que parezcan, cada una de las pipas de girasol ha sido hecha a mano en porcelana, un trabajo que ha llevado más de dos años y que ha sido realizado enteramente en un taller de  la ciudad china de Jingdezhen.

Sunflower Seeds compone un paisaje en el que nos podemos sumergir sensorialmente con  la vista, el tacto y el oído mientras vamos avanzando por la sala. La delicadeza y el cuidado puesto en esta instalación, además de la fragilidad del material que representan, contrastan con el acto de pisar sobre ella.

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Actualizado: La instalación de Ai Weiwei en la Tate Modern, cerrada por razones poco claras – El País.

Actualizado: La Tate Modern prohíbe al público caminar sobre las «pipas» del chino Weiwei – Público.

Imágenes: Tate Modern.